domingo, 7 de mayo de 2023

Retransmisión

 Comienzo de la retransmisión diferida...

Eh... Hola, sí ¿Se escucha? Vale. Sea quién sea quién me oiga, quiero que se tenga muy en cuenta lo que voy a decir a continuación. Es probable que ya no esté aquí cuando escuchen este mensaje. Verán, yo soy padre de familia, de una familia maravillosa compuesta por una hermosa y bondadosa mujer, y mis dos dulces niñas. Desde que vivo con ellas, mi próposito en esta vida ha sido su bienestar, que fueran felices y que pudieran desarollarse como personas. Aunque, bueno, digamos que quizás mi historia personal no viene al caso de lo que os quería contaros. Hay algo mucho mas importante, pese a que mi historia guarde algo de relación, aunque sea una nimiedad en comparación a la historia de la humanidad entera.

Digamos, que, antes la humanidad tenía sus cosas... Cosas a veces oscuras, y que muchas veces atentaban contra sí misma. Pero, con el desarrollo de la tecnología, todo fue a peor. Al principio pensábamos que esta tecnología supondría un avance en nuestra sociedad,  mas ha acabado siendo algo muy distinto. Todo lo contrario, al final, esa supuesta tecnología no sólo ha supuesto un retroceso a nuestros instintos mas primarios, sino que ha acabado con la humanidad entera, o al menos, con casi toda la humanidad.

Me explico. Años atrás, poco a poco hemos ido observando cómo los avances en robótica han ido en aumento a una velocidad vertiginosa. Tan rápido se sucedían, que prácticamente de mes en mes había una notable mejoría. Primero, desarrollaron IA's con conciencia plena de lo que eran, después los sistemas robóticos articulados que les permitían desplazarse encerrando su conciencia en lo que sería un robot de juguete, luego se mejoraron sus cuerpos mecánicos de manera que ya podían realizar movimientos y tareas mas complejas, y finalmente, con la elaboración de piel sintética y el perfeccionamiento de la impresión 3D en lo referente a la anatomía humana, se acabaron por desarrollar modelos de androides con un acabado que lindaba con la perfección. Este desarrollo provocó que llegase un punto que los androides no eran distinguibles respecto a los propios seres humanos.

Y cuando digo que no se distinguían, lo aseguro con total seguridad en mis palabras. No había manera de diferenciar un androide de una persona, a no ser que lo partieses por la mitad y urgases en su interior. Sus movimientos, sus comportamientos, su manera de interactuar... Nada, no había diferencia alguna con la realización de estas funciones por parte de un ser humano. Esto, en sus comienzos, hizo mucha gracia. Algunos se mofaban, otros estaban sorprendidos y algunos otros aplaudían sin cesar ante estos avances tecnólogicos, que según ellos mostraban de lo que era capaz el hombre usando de su racionalidad y de la técnica.

Con el paso del tiempo, se vió que todos ellos se equivocaban por diferentes razones. Digamos que el asunto no era tan gracioso como un par de chistosos pensaban, ni tampoco el desarrollo de estas tecnologías venían a demostrar nada, mucho menos algún tipo de superioridad, ya que la técnica acabó superando al hombre, e incluso esta, no parecía provenir del todo del hombre.


Esto se vió en el momento en el que dejaron de comercializar estos androides para uso doméstico, y se intentó hacer "el experimento social" de infiltrarlos en el mundo para ver si la gente era capaz de diferenciarlos. Obviamente estaban tan perfeccionados y sus reacciones parecían tan naturales, que digamos que el experimento -si fue algo tal- funcionó sin dar cabida al error. Estos androides convivieron con el ser humano algunos años sin problema alguno, a excepción de algunos paranoicos que debido a la difícultad a la hora de diferenciarlos entre sí, tendieron al suicidio por la constante confusión que estos sentían. No es broma el hecho de que muchos acabaron desarrollando diferentes enfermades mentales, las cuales se traducieron en suicidios cada vez mas extravagantes, desde el cortarse por la mitad con un sensor láser nuclear hasta lanzarse al interior de un tubo de ensayo de inmensas dimensiones y grandes toneladas donde sus cuerpos se deshacían sin quedar ni rastro de ellos.

Mas, dejando este tema un poco de lado, diríamos que a pesar de esta novedad, los años se sucedieron unos a otros con normalidad, hasta que un día todo cambió. Al principio, nadie sabía por qué pero así fue. De repente, sí que estos androides comienzaron a distinguirse de los humanos ¿Cómo? Muy sencillo. Los androides empezaron a matar a los humanos, uno tras otro, mientras que algunos otros los raptaban, y nadie sabía a dónde los llevaban. También, se descubrió mas adelante, que los supuestos casos de suicidio que he mencionado hace poco, no eran suicidios como tales, sino que habían sido los androides quienes habían ejecutado esas barbaridades al verse casi descubiertos por alguna gente que indagó mas en el asunto.

Así, pues, el caso era que cuando esto se comenzó a dar, muchos pensaban que los androides se habían vuelto locos, o es decir, que tenían algún fallo técnico. Nada mas lejos de la realidad. En verdad, estos androides aunque tuvieran conciencia y hubieran sido elaborados para asemejarse a los seres humanos, habían sido en verdad programados para ese fin. Es decir, las personas que se creían grandes científicos y técnicos en lo que a la inteligencia artificial se refiere, simplemente habían sido meros medios que permitieron el desarrollo de esos androides. Estos, en realidad, habían sido programados, y tenían esas ordenes integradas en su interior desde antes de que su conciencia hubiera sido transferida a un ordenador para posteriormente ser implantada en un cuerpo mécanico muy semejante al humano. Para ser mas preciso, una inteligencia superior, venida del mas allá, había creado esas conciencias robóticas en el principio de los tiempos, estas flotaban cual ideas platónicas hasta que se concretaron con el desarrollo técnico de las máquinas. Al final, lo que ocurría, es que mientras los hombres se creían algún tipo de deidad con la aplicación de las matemáticas al desarrollo técnico, en verdad lo que operaba de trasfondo eran las conciencias que ya habían sido creadas con anterioridad por no se sabe qué, y que terminaban implantándose automáticamente sobre aquellos cuerpos robóticos.

Y, dicho sea de paso, estas conciencias previas que se concretaron posteriormente en aquellas armaduras barnizadas con piel sintética, tenían el próposito de engañar a las personas para una vez satisfecha esta misión, acabar con la humanidad entera. Así, aquella inteligencia superior, podrían llegar a nuestro planeta a hacer vete a saber el qué. Podría ser colonizarnos, o quizás también sustituirnos por esas entidades robóticas, o vete a saber el qué... Esto no viene el caso, el próposito de mi mensaje es otro.

Para no andarme por las ramas, diré que cuando me pilló todo esto fue totalmente de imprevisto. Yo estaba fregando los platos, mientras mi mujer limpiaba la cocina a mi lado, en tanto que nuestras hijas jugaban en el salón, y, de repente algo o alguien pareció irrumpir en la entrada de la casa con un golpe muy fuerte. Fue entonces cuando salí corriendo para comprobar qué era, y cuando quise darme cuenta, uno de esos androides alargó tanto su brazo que me apresó contra la pared. Con tanta fuerza me sujetaba que yo no era capaz de moverme ni un milímetro del sitio, pese a que lo intenté como pude. Mientras luchaba por soltarme, pude ver como un par de androides mas entraron en mi casa y agarrando con violencia a mi familia, para posteriormente meterlas en una especie de cubos métalicos que arrastraban con unas cuerdas de hierro oxídado. Por último, los cubos fueron arrastrados por algo en dirección al jardín, y de ahí al cielo gracias a una nave que las llevaba a un lugar desconocido.

Fue tanta la fuerza con la que el androide me tenía sujeto el cuello, y tan la presión emocional por lo que estaba viendo, que caí sin querer completamente desmayado. Cuando abrí los ojos, me encontraba en soledad. Todo lo que tenía al rededor estaba destrozado, todo mi hogar eran ruinas y deshechos, no quedaba absolutamente nada. Al encontrarme con este panorama no pude evitar que millares de lágrimas se deslizasen por mis mejillas mientras gritaba con desesperación en compañía de todos mis miembros agitándose con espasmos. No comprendía por qué se las habían llevado, ni tampoco por qué a ellas sí y no a mí. Pero pronto descubriría la razón...

Salí escopetado hacía ninguna parte, quería respuestas, mas no sabía donde buscarlas ni cómo formular las preguntas adecuadas. En estas estaba, recorriendo la ciudad a la carrera y dando saltos, sin saber a dónde dirigirme, cuando tropecé con algún objeto que estaba por ahí tirado. Entonces, me caí justamente sobre un soporte de acero que se había partido por la mitad, y cuando quise darme cuenta, tenía la zona del estomágo abierta. Fue ahí cuando al mirar en dirección a mi herida ví que en vez de un estomago y unos intestinos humanos, tenía un conjunto de cables y unas luces que parpadeaban en el interior, y también, que en vez de una sangre rojo vino, me salía un líquido a veces azulado y a veces verde que se desparramaba en la calzada.

Así me enteré, justo antes de perecer, que no era un humano, sino un androide como todos aquellos que se habían llevado a mi familia. Esto provocó mi desconcierto hacía muchísimas cosas, no entendía nada. En primer lugar, si todos estaban programados para acabar con todos o raptarlos, ¿Por qué yo no reaccioné de igual modo? Y en segundo lugar, ¿Cómo no lo sabía yo mismo que era un androide? ¿Cómo vivía mi vida pensando que era un humano? Aunque, a decir verdad, no lograba recordar nada respecto a mi vida anterior a estar con mi familia, aquellos tiempos eran como una laguna brumosa repleta de sombras. En fin, tenía demasiadas dudas para ser resueltas en los pocos minutos que me quedaban de vida.

Es por eso, que antes de morir -o debería decir, antes de que el líquido de mi batería interna se vacíase por completo- decidí dejar aquellas dudas de lado, y grabar este mensaje para que todo aquel que pueda escucharlo intenté buscar el paradero de mi familia. Ya sea humano o androide, me da igual. Quisiera que se ayudase a mi familia, que se la recuperase y se la protegiese ante los peligros del nuevo mundo. Dejo sus datos y descripciones encriptados en este archivo, bastara un descompresor estándar para vislumbrarlos.

Hum, bueno... Parece que se me acaba el tiempo... Ya empiezo a ver todo borroso y me cuesta seguir profiriendo palabras, ya ni siquiera soy capaz de moverme, me he quedado pegado en el sitio. Creo que ya he dicho en líneas generales todo aquello que debía decir. Aunque, bueno, quizás sea importante declarar para acabar quEeEEe... zzzzzgftzzum...

Fin de la retransmisión.

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